Las alergias alimentarias pueden estar relacionadas a más recaídas de EM
En un estudio reciente, científicos han demostrado que las personas con EM que sufren alergias alimentarias tienen más probabilidades de experimentar ataques clínicos y lesiones en el cerebro que las personas sin alergias o con alergias no relacionadas con alimentos.
Last updated: 13th May 2019
- Debido a que el sistema inmunológico participa tanto en la EM como en las alergias, los investigadores analizaron si existe alguna relación entre las alergias y la actividad de la enfermedad.
- Los resultados de este estudio, en el que participaron más de 1.300 personas con EM, revelaron que las personas con alergias alimentarias registran más ataques clínicos y lesiones en el cerebro que aquellas con otros tipos de alergias o personas sin alergias.
- Estas conclusiones apuntan a nuevos planteamientos de investigación para desarrollar nuestra comprensión de cómo funciona el sistema inmunológico en la EM. Los mecanismos que se producen durante la aparición y la progresión de la EM implican una combinación compleja de factores genéticos y ambientales, que los investigadores intentan comprender mejor constantemente.
En la investigación de la EM se presta especial atención al sistema inmunológico, ya que sabemos que ataca por error a la vaina protectora de mielina que recubre las fibras nerviosas de las personas con EM. Sin embargo, aún no está claro lo que desencadena esta respuesta autoinmune.
Además de su participación en la EM, el sistema inmunológico también interviene en otras afecciones. Por lo tanto, los investigadores están estudiando si existe alguna relación entre la actividad de la EM y otras afecciones relacionadas con el sistema inmunológico, como las alergias.
En un estudio publicado recientemente, los científicos del Hospital Brigham and Women, en Boston, EE. UU., estudiaron la relación entre las alergias y la EM. Esta investigación ha formado parte de un gran estudio a largo plazo que se lleva a cabo en la clínica de EM (conocida como Investigación Integral Longitudinal de Esclerosis Múltiple, CLIMB, en el Hospital Brigham and Women).
Más de 1.300 personas con EM completaron un cuestionario indicando sus alergias alimentarias, ambientales y/o a medicamentos. La actividad de la EM de cada persona se evaluó registrando el número de ataques clínicos experimentados a lo largo de todo el curso de la enfermedad. También se registró la gravedad de los síntomas clínicos durante la visita más reciente a la clínica.
Además, se hizo un seguimiento de las lesiones en los cerebros de los participantes utilizando imágenes por resonancia magnética (IRM). El estudio utilizó una técnica de IRM específica conocida como mejora con gadolinio (Gd), que ayuda a los expertos a detectar la fase inflamatoria activa del desarrollo de la lesión. El número de nuevas lesiones en el cerebro observadas 90 días antes y después de completar el cuestionario de las alergias se supervisaron y utilizaron como indicadores de la actividad de la EM.
Los resultados revelaron que las personas con EM que tienen alergias alimentarias registran un número significativamente mayor de ataques de EM, y más del doble de probabilidades de desarrollar nuevas lesiones en comparación con las personas sin alergias. Las personas con otros tipos de alergias (no relacionadas con alimentos) no mostraron diferencias de importancia en sus síntomas de EM.
Si bien este estudio pone de relieve la relación entre las alergias alimentarias y la actividad de la EM, no necesariamente confirma que las alergias alimentarias causen la EM o causen ataques más frecuentes en la enfermedad. Además, el estudio también se basó en el recuerdo de las personas y en el autoinforme de alergias alimentarias, en lugar de alergias confirmadas clínicamente. A pesar de esto, los resultados indican que existe un vínculo potencial. El estudio analiza la posibilidad de que las alergias alimentarias puedan influir en el equilibrio de las bacterias intestinales, lo que a su vez puede afectar al sistema inmunológico, o que las alergias influyan directamente en la regulación del sistema inmunológico.
Si bien se necesitan más estudios para confirmar estas conclusiones e identificar los mecanismos biológicos involucrados, los resultados abren una nueva vía para desarrollar nuestra comprensión de cómo funciona el sistema inmunológico en la EM.
Para las personas con EM que sospechan que pueden tener alergias alimentarias, es importante consultar a profesionales sanitarios para obtener un diagnóstico claro de alergias alimentarias y para ayudar a identificar las estrategias adecuadas para evitar los alérgenos. Eliminar grupos amplios de alimentos sin un diagnóstico ni un consejo nutricional podría traducirse en deficiencias alimentarias importantes.
Agradecimiento a MS Research Australia – proveedor principal de resúmenes de investigación en nuestro sitio web.