Comer pescado puede reducir el riesgo de contraer EM
Un estudio de EE. UU. indica que las personas que comen pescado pueden tener menos probabilidades de contraer EM.
Last updated: 26th April 2018
- Un nuevo estudio ha demostrado que comer pescado al menos una vez a la semana o de una a tres veces al mes, además de tomar suplementos diarios de aceite de pescado, puede reducir el riesgo de contraer EM
- Los resultados sugieren que los ácidos grasos omega 3 presentes en el pescado pueden estar asociados con la reducción del riesgo de contraer EM
- El estudio se ha dado a conocer en la reunión anual internacional de la Academia Americana de Neurología
Un estudio de EE. UU. dado a conocer en la conferencia anual de la Academia Americana de Neurología, ha demostrado que comer más pescado puede reducir el riesgo de contraer EM.
El papel de la dieta y el estilo de vida en la EM es un tema de gran interés para las personas con EM y para la comunidad de investigadores de la EM, ya que el estilo de vida se puede cambiar con bastante facilidad y se ha demostrado que ofrece grandes beneficios. Un estudio previo ha demostrado que los ácidos grasos poliinsaturados y, en particular, el omega 3 presente en el pescado y los mariscos puede ofrecer beneficios para la EM, aunque es necesario seguir investigando.
Un nuevo estudio realizado por la Dra. Annette Langer-Gould de Kaiser Permanente, Sur de California, se suma a este campo de investigación centrándose en el consumo de pescado y de suplementos de aceite de pescado. El estudio contó con una encuesta realizada a 1153 personas acerca de la cantidad de pescado que consumen habitualmente, además del consumo de suplementos de aceite de pescado. Los participantes se clasificaron como de «alta ingesta» o «baja ingesta», según la cantidad de pescado que habían consumido. Los de la categoría de «alta ingesta» tomaban una porción de pescado por semana o de una a tres porciones al mes, además de tomar suplementos diarios de aceite de pescado. Las personas en la categoría de «baja ingesta» tomaban menos de una porción de pescado al mes y ningún suplemento de aceite de pescado.
Las respuestas de las personas con EM o SCA (síndrome clínico aislado, un precursor de la EM) se compararon con las respuestas de las personas sin EM. 180 personas con EM se situaron en la categoría de «alta ingesta», mientras que el número de personas sin EM fue de 251. Esto quiere decir que las personas que consumen más pescado y suplementos de aceite de pescado tienen un 45 % menos de posibilidades de contraer EM.
Aunque se han logrado unos resultados excelentes, los científicos señalaron que se trata de un estudio de relación: una investigación que muestra que dos factores están relacionados, pero no pueden demostrar una relación de causa y efecto.
La segunda parte del estudio se centró en la genética de los participantes. Los investigadores analizaron 13 diferencias en los genes que regulan la forma en que el cuerpo combate los ácidos grasos. Descubrieron que dos de estos cambios genéticos estaban relacionados con un menor riesgo de contraer EM, independientemente de la cantidad de pescado de la dieta de una persona. Esto indica que tanto nuestra dieta como nuestra composición genética pueden influir a la hora de contraer EM.
La investigación sobre la dieta y el estilo de vida puede ser complicada, ya que es difícil separar los diversos y numerosos componentes de la dieta, y la influencia de otros factores del estilo de vida en cualquier momento de la vida de una persona. Sin embargo, una dieta saludable que incluya una gran cantidad de alimentos frescos, una gran variedad de nutrientes esenciales y que evite un consumo elevado de alimentos procesados, es muy importante para el bienestar de las personas con y sin EM. Este estudio también apoya la idea de que los ácidos grasos poliinsaturados, el omega 3 en particular, pueden ofrecer beneficios para las personas con riesgo de contraer EM.
«Este estudio aporta nuevas pruebas de que una dieta rica en pescado y ácidos grasos poliinsaturados omega 3 ofrece beneficios para la salud», comentó el Dr. Langer-Gould. «Además de fomentar una mejor salud cardiovascular, una dieta rica en pescado o mariscos, también puede reducir el riesgo de contraer EM».
Agradecimiento a MS Research Australia – proveedor principal de resúmenes de investigación en nuestro sitio web.