La EM es compleja y puede causar muchos síntomas diferentes. La EM temprana puede presentarse como un historial de síntomas imprecisos, que pueden producirse esporádicamente durante un período prolongado de tiempo y, con frecuencia, también podrían atribuirse a otras afecciones médicas. Los síntomas invisibles o subjetivos son difíciles de comunicar a los médicos y a los profesionales de la salud y es bastante frecuente que lleve varios meses dar un diagnóstico y resulta frustrante, ya que cabe la posibilidad de que tarden incluso más tiempo.

Incluso cuando una persona muestra un patrón «clásico» de síntomas de tipo EM, los síntomas deben ajustarse a los criterios acordados (llamados criterios mcDonald) antes de que un médico o neurólogo pueda diagnosticar EM

clínicamente «definida». En 2001, el Panel Internacional sobre el Diagnóstico de la Esclerosis Múltiple actualizó los criterios para incluir pautas específicas para el uso de imágenes por resonancia magnética (RM), análisis de líquido cefalorraquídeo (LCR) y potenciales evocados visuales (PEV) para acelerar el proceso de diagnóstico.

Hay varias pruebas que se pueden utilizar para averiguar si una persona padece EM o no, pero no existe una sola prueba para diagnosticar la EM que sea concluyente por sí sola. Las pruebas incluyen:

Examen neurológico

Su neurólogo le hará muchas preguntas sobre síntomas y problemas anteriores, esto se conoce como «anamnesis». Ayuda al neurólogo a hacerse una mejor idea sobre usted y puede ayudar a identificar otros problemas que puedan explicar los síntomas actuales. Un reconocimiento físico verifica si hay cambios o debilidades en los movimientos oculares, la coordinación de las piernas o las manos, el equilibrio, la sensibilidad, el habla o los reflejos. Si bien un neurólogo puede tener una firme sospecha de EM en esta etapa, el diagnóstico no se dará hasta que los resultados de otras pruebas confirmen la EM.

Resonancia magnética (RM)

Un escáner de resonancia magnética utiliza un campo magnético fuerte para crear una imagen detallada del cerebro y la médula espinal. Muestra la ubicación exacta y el tamaño de cualquier daño o cicatrización (lesiones). Para obtener la imagen del cerebro y la médula espinal, se tumbará y entrará en un pequeño túnel en el centro del escáner de resonancia magnética. El proceso puede durar entre 20 y 60 minutos y es indoloro, pero bastante ruidoso.

Recientemente, se han utilizado potentes técnicas de resonancia magnética para estudiar la inflamación y el daño tisular en regiones del cerebro, para las cuales las técnicas convencionales de resonancia magnética no son lo suficientemente sensibles. Varias de estas técnicas de resonancia magnética no convencionales se están mejorando para su uso en el diagnóstico de la EM.

Potenciales evocados

Las pruebas de potencial evocado consisten en medir el tiempo que tarda el cerebro en recibir los mensajes de los ojos. El neurólogo colocará pequeños electrodos en la cabeza para controlar las ondas cerebrales a medida que se presentan estímulos visuales en una pantalla. Estos electrodos miden pequeños impulsos eléctricos; no son dolorosos. Si la EM o una enfermedad similar están presentes, esta prueba puede detectar mensajes hacia y desde el cerebro que viajan más lentamente de lo habitual.

Punción lumbar

Durante una punción lumbar (o punción raquídea), el neurólogo inserta una aguja en el espacio alrededor de la médula espinal, con anestesia local. Se saca una pequeña muestra del líquido que fluye alrededor del cerebro y la médula espinal, llamado «líquido cefalorraquídeo» y se analiza para detectar anomalías que ocurren en la EM. El líquido se enviará a los laboratorios para ser analizado. En algunos casos también se medirá la presión del líquido. Es habitual que las personas informen de dolores de cabeza después de una punción lumbar. Este es un efecto secundario reconocido y el neurólogo puede aconsejar sobre la mejor manera de afrontarlo.

Los científicos también están identificando indicadores biológicos, o «biomarcadores», en la sangre o el líquido cefalorraquídeo que se pueden utilizar en el diagnóstico o seguimiento de la afección.

 

A man operates an MRI machine from a computer

MRI machine with operator. Photo: Robert van Willigenburg

A set of images from a Magnetic Resonance Imaging scan

A set of images from a Magnetic Resonance Imaging scan